Los mitos y la educación especial

[Existen muchos mitos en materia de educación especial. Para poder enfrentarlos es necesario conocerlos. A continuación explicamos algunos de los más recurrentes y peligrosos.]

Si bien es cierto que la negación puede llevar a padres y madres a cometer errores de juicio en la educación de los hijos, los mitos también juegan un papel fundamental en las decisiones que tomamos.

En materia de educación especial uno de los mitos que he observado con mayor frecuencia es la idea de que los niños de educación especial se educan en salones de clases separados del resto de los niños “normales” o “típicos”. Esto es cierto para los niños o niñas que padecen de alguna discapacidad severa, sea ésta física o mental. Pero la realidad es que la mayoría de los niños con diagnósticos que requieren educación especial son completamente capaces de trabajar en salones de clases regulares.

Lo anterior se logra mediante la confección de Programas Educativos Individualizados (PEI en español, IEP en inglés). Estos planes proveen las erramientas educativas que ayudarán al niño o niña a alcanzar el éxito académico. (En un próximo tema hablaré de los PEI en más detalle, pues ahora sólo quiero enfocarme en los mitos).

Otro mito común es pensar que un dianóstico o condición determina de antemano el futuro de una persona. Existen innumerables historias de personas que han superado con éxito condiciones que muchos años atrás parecían imposibles de superar.

Cualquier persona es capaz de llagar tan lejos como su imaginación le permita. Es tarea de la sociedad eliminar las barreras que interfieren con los sueños de las personas. Y somos nosotros los ciudadanos los que tenemos que actuar a nivel individual y colectivo para que la sociedad no interfiera con los sueños de nuestros hijos.